Que no se diga de mi generación...

El sábado fuimos con mis amigos a un horfanato y el domingo el pastor citó a Bonhoeffer.
Esa unión generó que el domingo haya estado particularmente reflexiva acerca de un tema que me apasiona.
Este fue el resultado.
Se que quizás algunos estén esperando más post de la cultura y curiosidades pero esto es parte trascendental de mi paso por este país. Acá vamos

"la iglesia permanecía muda, cuando tenía que haber gritado... La iglesia reconoce haber sido testigo del abuso de la violencia brutal, del sufrimiento físico y psíquico de un sinfín de inocentes, de la opresión, el odio y el homicidio, sin haber alzado su voz por ellos, sin haber encontrado los medios de acudir en su ayuda. Es culpable de la vida de los hermanos más débiles e indefensos de Jesucristo"

Dietrich Bonhoeffer

Es tremendo.
Esto lo dijo un pastor alemán ante la segunda guerra mundial al ver el desastre que ocurría con los judíos y la inactividad de la iglesia ante la injusticia.
Pero puedo usarla para otras tragedias actuales.
Qué pasa por ejemplo con la crisis mundial que viven los millones de niños huérfanos? Sabías que hay 132 millones de niños huerfanos en el mundo?
Y ante esta situación : no estará la mayor parte de la Iglesia muda?
Estará alzando la voz?
Estará encontrando o tan siquiera buscando los medios para ayudarlos?
Vos estas conciente de lo que sucede?
Estarás haciendo algo al respecto? Y yo? Me pregunto si yo estoy haciendo lo necesario.
Si nos excusasamos diciendo que no tenemos nada que ver, que no tenemos los medios, el cómo, las formas, etc o pensamos que estamos para otra cosa te invito a que juntos leamos que nos dice la Biblia en Isaías 1:17

"defiende la causa de los huérfanos"

El contexto de este pasaje es interesante. Dios está diciéndoles a Israel que toda su religiosidad apesta. Todas sus ceremonias religiosas. Que dejen de hacer lo malo y aprendan a hacer el bien.

No todos estamos llamados a adoptar pero hay un montón de cosas que si podemos hacer, desde orar, donar, apoyar, jugar con ellos y visitarlos hasta apadrinarlos por nombrar sólo algunas.
Dios nos pide que hagamos justicia al huérfano. No creo que tenga que agregar nada más a esto.
Oro para que Dios nos de múltiples ideas de como poner en práctica la justicia para estos millones de niños que son los débiles de nuestro tiempo. Y que no se diga de mi generación que permaneció muda cuando debería haber gritado.

Salud!